MANIFIESTO -versión en español
Estudiantes, profesores miembros de la administración, personal técnico,
Préstamos pleno apoyo a las escuelas públicas de arquitectura y de paisajismo sufrientes, en particular la de Rouen, aquella tomó una semana de retraso con su inicio de curso por falta de medios humanos y financieros. Nos movilizamos entonces por solidaridad y colectivamente con todas las demás ENSA(P) de Francia.
La intervención de François Brouat, el director de ENSAPB, el viernes por la tarde en la Asamblea General, en la que dio a entender que nuestra escuela no se veía afectada por el déficit presupuestario, que estamos bien dotados, no debe poner en causa la legitimidad de nuestro movimiento.
Nosotros también vemos cómo disminuye el número de profesores.
Nosotros también vemos cómo nuestros profesores contractuales y doctorandos están mal pagados.
Nosotros también vemos que nuestros profesores-investigadores y doctorandos están mal pagados y mal considerados, y nuestro personal administrativo sobrecargado de trabajo.
Nuestras escuelas se están privatizando poco a poco y nos oponemos totalmente.
Nuestra generación duda frente a una sociedad en crisis medioambiental y social.
El temor de la mayoría de nosotros es ser inútiles en un mundo que se colapsa o, peor aún, contribuir a su colapso. Dudamos de nuestra futura cualificación como arquitectos, que se cuestiona constantemente. ¿Seremos útiles a la sociedad? Queremos creer que el arquitecto sigue teniendo un rol en la sociedad y queremos que nuestra escuela nos de
las claves para tomar posición en el mundo.
Por eso, exigimos una educación a la altura de estos retos : cursos multidisciplinares, dedicados a la ecología, al humanismo, el feminismo, que nos presenten
arquitecturas alternativas y subversivas.
- ¿Por qué sólo se propone un estudio de rehabilitación por semestre cuando sabemos
que la nueva arquitectura no tiene futuro?
- ¿Por qué nunca se nos habla de las mujeres arquitectas?
- ¿Por qué los estudiantes precarios tienen que pagar todo su material?
Estas preguntas son legítimas, y los debates son necesarios entre los estudiantes, con los profesores y la administración a los que invitamos a venir y movilizarse esta semana.
Como a nivel nacional, una revuelta está en marcha. No nos la perdamos e impliquémonos de verdad desde ahora mismo.